Necesitas la presencia de Dios en tu vida más de lo que necesitas ninguna otra cosa. Pero, ¿dónde encuentras la presencia de Dios?Recuerdo muy bien la primera vez que escuché a alguien hacer una de las oraciones más antiguas de la iglesia:
«Ven, Espíritu Santo», ¡con una expectativa real de que el Espíritu Santo vendría! Era un domingo por la noche del año 1982. Habíamos tenido un encuentro en la cripta después del servicio vespertino de HTB. Al orar
«Ven, Espíritu Santo» vimos cómo sucedieron unas cosas notables. Vimos a la gente ser llena del Espíritu Santo con manifestaciones físicas similares a aquellas descritas en el libro de los Hechos cuando habla del día de Pentecostés.
Vimos sanaciones físicas extraordinarias que sucedieron al día siguiente cuando alguien oró de nuevo diciendo
«Ven, Espíritu Santo».Dios siempre está presente con Su pueblo por medio del Espíritu Santo. Cuando oras «Ven, Espíritu Santo» estás pidiendo un mayor sentido de la presencia de Dios.
En el Nuevo Testamento hubo veces en las que el Espíritu Santo llenó a una reunión de personas de manera soberana y espontánea (Hechos 2:2; 10:44). También hay otras veces en las que los discípulos oraron pidiendo el Espíritu Santo: «Después de haber orado, tembló el lugar en que estaban reunidos; todos fueron llenos del Espíritu Santo, y proclamaban la palabra de Dios sin temor alguno» (4:31).
En el pasaje del Antiguo Testamento de hoy leemos cómo «la gloria del Señor había llenado el templo»
(1 Reyes 8:11).
Necesitas la presencia de Dios en tu vida más de lo que necesitas ninguna otra cosa. Pero, ¿dónde encuentras la presencia de Dios?Recuerdo muy bien la primera vez que escuché a alguien hacer una de las oraciones más antiguas de la iglesia:
«Ven, Espíritu Santo», ¡con una expectativa real de que el Espíritu Santo vendría! Era un domingo por la noche del año 1982. Habíamos tenido un encuentro en la cripta después del servicio vespertino de HTB. Al orar
«Ven, Espíritu Santo» vimos cómo sucedieron unas cosas notables. Vimos a la gente ser llena del Espíritu Santo con manifestaciones físicas similares a aquellas descritas en el libro de los Hechos cuando habla del día de Pentecostés.
Vimos sanaciones físicas extraordinarias que sucedieron al día siguiente cuando alguien oró de nuevo diciendo
«Ven, Espíritu Santo».Dios siempre está presente con Su pueblo por medio del Espíritu Santo. Cuando oras «Ven, Espíritu Santo» estás pidiendo un mayor sentido de la presencia de Dios.
En el Nuevo Testamento hubo veces en las que el Espíritu Santo llenó a una reunión de personas de manera soberana y espontánea (Hechos 2:2; 10:44). También hay otras veces en las que los discípulos oraron pidiendo el Espíritu Santo: «Después de haber orado, tembló el lugar en que estaban reunidos; todos fueron llenos del Espíritu Santo, y proclamaban la palabra de Dios sin temor alguno» (4:31).
En el pasaje del Antiguo Testamento de hoy leemos cómo «la gloria del Señor había llenado el templo»
(1 Reyes 8:11).